
En el Istmo, la tlayuda se disfruta como una cena típica y es común encontrarla en los mercados o en puestos nocturnos. Es una comida que representa la mezcla perfecta entre los ingredientes ancestrales del maíz y las influencias coloniales.
Ingredientes (para 1 tlayuda istmeña)
Base:
- 1 tlayuda (tortilla de maíz grande, gruesa y semi tostada)
- Asiento de puerco (manteca con residuos del chicharrón)
- 1/2 taza de frijoles negros refritos (de preferencia con hoja de aguacate)
Proteína (al gusto):
- Cecina enchilada o tasajo
- Chorizo o longaniza istmeña
- También se puede usar quesillo (queso Oaxaca), aunque no es obligatorio
Guarnición:
- Rebanadas de aguacate
- Col o repollo finamente picado
- Tomate, cebolla y chile verde en rodajas
- Salsa istmeña (molcajeteada, de chile pasilla o chile costeño)
Preparación
- Preparar la base:
Calienta la tlayuda en un comal o sartén grande hasta que esté crujiente por fuera pero flexible por dentro. Unta una capa generosa de asiento de puerco por toda la tortilla. - Agregar los frijoles:
Unta los frijoles negros refritos encima del asiento. Deben estar bien sazonados y espesos. - Añadir la proteína:
Cocina la cecina, tasajo o chorizo al gusto. Una vez listos, colócalos sobre la tlayuda. También puedes desmenuzar un poco de quesillo si lo deseas. - Coloca las verduras:
Añade col picada, rodajas de tomate, cebolla, chile verde y unas rebanadas de aguacate. - Dobla y calienta:
Dobla la tlayuda a la mitad como una quesadilla grande y colócala de nuevo en el comal, dorándola por ambos lados hasta que esté caliente y crujiente. - Sirve con salsa:
Acompaña con una buena salsa istmeña, preferentemente hecha en molcajete con chile costeño, ajo y sal.